Extensión de la vida útil del tablero existente.
Menor tiempo de corte de energía (libranza) en comparación con el cambio completo del tablero.
Disminución en el paro de producción, pasando de días a minutos.
Ahorros en CAPEX > 30% (inversiones de capital) por el cambio parcial y no total del tablero.
Menor costo y riesgo porque no hay cambio en los cables, ni obra civil.